El actor y director, Héctor Manrique, presentó en Chile la exitosa obra teatral ‘Sangre en el diván’, que narra el delirio del psiquiatra Edmundo Chirinos, cuando fue acusado del asesinado de una paciente llamada Roxana Vargas.
Manrique ofreció una rueda de prensa para contar lo que significaba la representación de esta obra de teatro y de este personaje, basado en el libro de la periodista Ibéyise Pacheco.
Consideró que esta obra es una manera de alzar la voz contra las injusticias y no ser indiferente a la realidad. Además, aseguró que hacer esta producción fue un reto personal y profesional.
El motivo personal, es porque Edmundo Chirinos fue parte de su familia, debido a que era el padrino de su hermano y un gran amigo de su padre. Y en lo profesional, por lo que significaba interpretar un personaje tan complejo.
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Héctor Manrique sostuvo que en muchas oportunidades estuvo a punto de suspender todo y no hacer la obra ‘Sangre en el diván’ e incluso en su primera presentación casi se va, pero cuando vio al público entrando a la sala decidió acostarse en la camilla y empezar la interpretación así.
En ese sentido, reveló que su padre le pidió no hacer esta obra de teatro por lo que representaba Edmundo Chirinos para la familia. Y a pesar de ello, el actor realizó esta pieza teatral como una forma de alzar la voz independientemente de la persona que fuera.
Todo esto lo llevó a tener meses de ensayo para lograr que el público viera en el escenario al psiquiatra Edmundo Chirinos. Cosa que logró, pues contó una anécdota que le sucedió en un hotel, luego de una presentación.
“Una pareja me saludo como si yo fuera el doctor Chirinos, al principio pensé que era una broma, pero luego me di cuenta que no. Que de verdad creían que yo era Edmundo. No les dije nada y les seguí la corriente. Obviamente después me reí mucho”, dijo.